El Comité del 6 de enero dobla su autoridad porque la acusación de Bonan sirve como una advertencia para otros testigos reacios

En este punto, Trump ha defendido a muchos de sus ex empleados con amplios reclamos de privilegio ejecutivo mientras busca mantener unas 700 páginas de registros de su presidencia fuera de las manos de la junta. Un independiente La batalla legal Juega en las canchas. Trump ganó un alivio en una corte federal de apelaciones el jueves Su solicitud fue concedida No puede apelar la decisión del tribunal inferior de suspender la divulgación de ciertos documentos y buscar el privilegio administrativo para retenerlos del panel.

El abogado de Meadows dijo que no cooperaría con el panel hasta que los tribunales se pronunciaran sobre los reclamos de derechos ejecutivos de Trump. El presidente Joe Biden ha negado categóricamente las acusaciones, diciendo en una correspondencia reciente con los Archivos Nacionales, el asesor de la Casa Blanca y guardián de los registros de la Casa Blanca de la administración Trump, que tales afirmaciones sobre el privilegio ejecutivo “no son lo mejor para los intereses de Estados Unidos. . ” Ante los “hechos extraordinarios” ocurridos el pasado 6 de enero.

Dada la tibia respuesta a las demandas de los leales a Trump hasta ahora, los líderes del grupo creen claramente que la acusación de Bonan demostrará a Meadows y otros que aquellos que se violaron a sí mismos en la búsqueda para investigar la participación de la Casa Blanca en los eventos del 6 de enero serán responsables. .

En una declaración conjunta el viernes por la noche, Penny Thompson, líder de los demócratas de Mississippi, y Liz Cheney, vicepresidenta de Wyoming, una de las dos republicanas que forman parte de la junta, dijeron que la acusación de Bonan debería enviar un mensaje claro a cualquiera que crea que es posible ignorar la elección. No consideramos necesario comentar sobre tales fabricaciones “.

El ex subdirector del FBI, Andrew McCabe, dijo que el 6 de enero fue un momento importante para el grupo, incluso si no estaba cerca de ser escuchado por un grupo de posibles bebedores en cada paso del proceso legal.

El congresista de Illinois Adam Kinsinger, otro republicano que forma parte del grupo, le dijo a Topper el viernes por la tarde que no hay duda de que los republicanos intentarán matar al grupo si toman el control del Congreso el próximo año.

“Creo que no hay duda de que sucederá”, dijo. “Es por eso que, francamente, creo que Trump está tratando de estancarse. No tienen privilegios de gestión. Saben que las respuestas no serán grandes para ellos, por lo que su esperanza es asumir el cargo el próximo año o el próximo”.

“Puede que no le guste, puede que no le guste el ensayo. Puede pensar que no se ha hecho nada malo”, dijo Kinsinger. “Pero no se puede evitar. Es importante que el pueblo estadounidense haga oír su voz y obtenga respuestas en el Congreso”.

El conocimiento de Bonan de los eventos previos al 6 de enero puede seguir siendo un misterio

“No va a suceder como piensas. ¿Verdad? Va a ser muy inusual”, dijo Bonan durante el podcast. “Todo lo que puedo decir es, entra en el cinturón … Tú hiciste esto, mañana es el Día del Juego. Así que entra en el cinturón. Prepárate. Todo el infierno se romperá mañana”.

Se espera que Banan se entregue el lunes y comparezca ante el tribunal el lunes por la tarde. Su abogado le dijo al panel que no cooperaría con la investigación porque Trump le aconsejó que no lo hiciera y argumentó que los documentos y testimonios solicitados por el panel podrían estar protegidos por las afirmaciones ejecutivas del ex presidente. “Debemos aceptar su guía y respetar su llamado al privilegio ejecutivo”, dijo el abogado Robert Costello al panel, refiriéndose a Trump.

El fiscal general Merrick Garland estaba bajo presión para poner el músculo legal detrás de las demandas del grupo, ya que muchos de los abogados del grupo argumentaron que los aliados de Trump nunca tomarían sus demandas en serio sin mostrar fuerza. El expresidente pasó cuatro años en la Casa Blanca tratando de consolidar su propio poder dentro de su poder ejecutivo en violación de las regulaciones gubernamentales y los poderes del Congreso, y muchos de sus ex ayudantes siguieron su ejemplo. La democracia estadounidense casi se derrumbó en un golpe de estado el 6 de enero.

“Desde el primer día que asumí el cargo, le prometí al personal del Departamento de Justicia que le mostraríamos al pueblo estadounidense que el departamento se adhiere al estado de derecho, los hechos y la ley, y que la ley defiende la igualdad ante la ley. . “Refleja el compromiso”.